EL ALUMNO COMO PROTEGONISTA DE SU
PROCESO DE APRENDIZAJE
Tomar el aprendizaje como un reto, que impulse a no limitarse a repetir, sino a buscar e
investigar, a salirse de la zona de confort a la que el alumno/a está acostumbrado.
Aprender no es reproducir.
Indagar
y realizar producciones propias e investigaciones de lo visual a partir de una reflexión y una documentación
seria, rigurosa y amplia, desde una perspectiva autorreflexiva.
Construir
imágenes para dialogar con las ya existentes, produciendo discursos, contradiscursos y narrativas
alternativas, pues al igual que la lectura y la escritura, el visionado
y creación de imágenes son dos caras de la misma moneda.
Buscar lo actual, lo presente, lo
emergente
La
reflexión final es fundamental
pues es uno de los productos más valiosos del proceso de aprendizaje.
El
objetivo no es sólo acumular datos, información, técnicas y procedimientos sino
sobre todo DARLES SENTIDO DESDE EL YO, desde la responsabilidad y el discurso
personal.
Reflexionar sobre el proceso seguido
El
desarrollo de la creatividad ha de ir aplicado no sólo al resultado sino al procedimiento de aprendizaje, a
la detección de problemas, a la búsqueda de soluciones. Saber trabajar en situaciones muy
cambiantes y complicadas.
Salir del modelo reproductivo.
REFLEXIONAR, COMPRENDER Y CONSTRUIR UN
CONOCIMIENTO PROPIO